Se rueda: Yo maté a Adolf Hitler

Parece ser que ya está confirmada la adaptación al cine de la novela de Jason, publicada por Astiberri, Yo maté a Adolf Hitler. El rodaje comenzará a principios de 2013 y el encargado de llevar a cabo el proyecto será Timo Vuorensola. Como curiosidades podemos avanzar que contará con un presupuesto de más de 10 millones de dólares y que, para crear al personaje de Hitler, se utilizarán técnicas similares a las que ya se emplearan en El señor de los anillos para dar vida al personaje de Gollum.

Esta novela gráfica es una ucronía que plantea un presente-futuro en el que los asesinos a sueldo gozan de un estatus importante en la sociedad. Atendiendo a esta premisa, un científico contrata a uno de ellos para que viaje en el tiempo y mate a Hitler antes de que pueda alcanzar el poder en Alemania, pero parece que las cosas no salen según lo previsto y el resultado es un final inesperado y sorprendente. Con un peculiar y personal estilo en el que el silencio es la nota predominante Jason nos adentra en el ¿qué hubiera pasado si...?

Mientras este proyecto cinematográfico cobra vida que mejor manera de esperar que descubriendo esta novela.

Ya está en mis manos.

Bueno, por fin a llegado a su final la larga espera, ya tengo en mis manos Danza de dragones. Tengo que reconocer que se ha hecho duro desde que terminé Festín de cuervos pero ya está aquí. Prometo hacer la reseña de este "peazo" de libro (1138 páginas), aunque con el verano por medio va para rato, así que si alguien se adelanta no pasa nada, no hay duda de que dará para muchos comentarios, debates y charlas...
Están los personajes que no aparecieron en Festín, pero también aparecen unos inquietantes caballero perdido, príncipe de Invernalia, el derrocador de reyes, domador de dragones... Nada, que empiezo ya y a 32 grados de temperatura, the winter is coming.
Lo extraño de todo esto es que sin haber empezado este quinto volumen ya me estoy preguntando cuándo empezará Martin el sexto volumen.

El ejército de Alsacia: intervención española en el Alto Rhin 1633/1634. Carlos de la Rocha, Hugo A. Cañete y Javier González Martínez.

Los hechos que en este libo se describen se enmarcan en la época en la que transcurre la Guerra de los Treinta Años y nos va a narrar el papel que llevaron a cabo tropas españolas en tierras de Alsacia y Baviera.

España en aquella época era una nación que combatía en todos los teatros de operaciones imaginables: por mar, tenía que defenderse de los piratas y de la eficaz Armada holandesa que acosaba continuamente las rutas que abastecían desde América a las maltrechas arcas españolas; por tierra, a la guerra de Flandes se le unían ahora otros frentes como el de Europa Central con los alemanes protestantes y los suecos de Gustavo Adolfo y por si fuera poco los franceses de manos del hábil Richeleu se consolidaban en Lorena.

Todo esto hacía peligrar el conocido como Camino español que comunicaba las posesiones que la Corona poseía en Italia con Los Países Bajos Españoles.

Ante este panorama el conde-duque de Olivares ordena la creación de un ejercito que estará al mando del duque de Feria, para limpiar la zona de Alsacia y Lorena de enemigos y así dejar libre el Camino español para que así el hermano de Felipe IV, el cardenal infante don Fernando de Austria, pueda desplazarse a los Países Bajos con otro ejercito.

Este panorama tan intrincado viene explicado de manera magnífica en este volumen. Comienza con una breve exposición sobre los motivos que llevaron a la creación de este ejército, lo difícil que era reclutar en la exhausta corona española por falta de hombres y de dinero para poder pagar.

A pesar de todas estas dificultades se podrán crear tres tercios que actuarán en la zona de Alsacia junto a las tropas de la liga católica. La sola presencia de los tercios, como podremos comprobar con la lectura de este excelente libro, hará pensar a más de un enemigo el entrar en combate.

A la magnífica y clara exposición de los hechos se le unen unos excelentes mapas, y unas muy buenas ilustraciones que ayudarán a entender y seguir mucho mejor el itinerario y hechos del ejercito de Alsacia.

En definitiva, un libro excelente en la exposición de los hechos y en el acompañamiento gráfico.

P.D. Ya sé que he utilizado muchos excelentes y magníficos en la elaboración de la reseña, pero no hay duda, se los merece.

Mares Salvajes: un viaje al Ártico. Javier Reverte.

Javier Reverte nos “obsequia” con otro de sus viajes, esta vez al Ártico y con un objetivo, recorrer el Paso del Noroeste en el barco ruso Akademik Ioffe.

El Paso del Noroeste se convirtió en un mito, una especie de “Grial Ártico” como algún historiador lo calificó. Su búsqueda empezó en 1497 por españoles e ingleses terminando en 1906, y en cuyo empeño murieron numerosas personas. Historias de naufragios y tragedias, de heroísmo inútil en muchos casos y que Reverte recoge de manera amena alternando estos episodios con sus vivencias en el viaje.

De todas las historias que aparecen en este libro me quedo con dos que son las más me han llamado la atención.
Por un lado la de Franklin que a mediados del siglo XIX se lanzó en busca del Paso del Noroeste, intento que le llevó a la muerte a él, a sus 129 hombres y a otros muchos marineros que se lanzaron en su búsqueda. A pesar de la tragedia, Franklin fue elevado a mito por los ingleses y tuvo tal repercusión este episodio en la Inglaterra del siglo XIX que incluso se hizo una canción sobre el asunto, adaptada a en el tiempo por artistas como Dylan, Sineád O' Connor, Pentangle and John Renbourn, aunque yo me quedo con la llevaron a cabo Micheál Ó'Domhnaill y Kevin Burke (componentes de la mítica banda Bothy Band).

Después de esta expedición acabada en tragedia, hubo otra que terminó con éxito, la del primer hombre en cruzar el Paso del Noroeste en 1906, el noruego Roald Amundsen. Una vida plagada de éxitos en la exploración, pero que también tuvo un final trágico al estrellarse el hidroavión en el que iba al rescate del italiano Nobile perdido en el Polo Norte en 1928.

Entre exploraciones y vivencias, Reverte deja un hueco a la reflexión que nos tendría que hacer pensar a todos.
Primero, que lo que Amundsen tardó en hacer entre 1903 y 1906, puesto que el Paso se cerraba por el hielo, Reverte lo hizo en un crucero turístico en unas semanas "gracias" al calentamiento global. El deshielo es una realidad y si sigue a este ritmo en el 2050 el Ártico, durante los meses de verano, puede estar libre de hielos y elevarán los oceanos 32 centímetros.
Además el Ártico es una zona rica en recursos como gas, petróleo y ya ha comenzado la "lucha" entre naciones como Rusia , EE.UU., Canadá, Dinamarca y Noruega para ver a quién pertenece esta zona. Si unimos estas dos realidad desconocemos cuáles podrían ser las consecuencias futuras, pero desde luego conociendo al hombre nada bueno tendrá.
Y por último y no menos importante, es una ruta de gran importancia económica ya que une el Atlántico y el Pacífico de manera más rápida y económica para los buques comerciales que las rutas tradicionales del Canal de Suez y de Panamá, con el peligro que esto esto conlleva, contaminación y riesgo de desastres naturales (no olvidemos el desastre del Exxon Valdez)

Todos estos factores llevan a convertir el Ártico en un auténtico vertedero ¿Somos conscientes de lo que estamos haciendo con el planeta?.